Mil oficios, un hombre

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Él es de esos señores que van por la despensa a fin de mes, de esos señores que comen de todo y no le hacen cara a nada, de esos señores que ya tienen 60 y más. A veces le duelen las articulaciones y su dosis mensual de glucosamina cuesta alrededor de 400 pesos.

Se salta las comidas por olvidadizo y por ahorrar. Le gusta el huevo y lo sabe comer con bolillo o con tortilla, dice que eso ni siquiera le importa, que solo quiere engañar a su  tripa.

Entre los 11 millones 56 mil 534 beneficiarios de la Pensión para el Bienestar de los Adultos Mayores, se encuentra Paquito, quien desearía tener cartílagos más fuertes y un apoyo gubernamental digno.

Los 4,800 pesos que le depositan al bimestre antes eran suficientes, pero viviendo en un país con un alto porcentaje acumulado de inflación, ahora parece poco.

Marzo concluyó con una tasa de inflación anual de 6.85%, su nivel más bajo desde octubre de 2021 según el INEGI. Sin embargo, la población sigue sufriendo los estragos de este fenómeno día con día. 

El aumento inesperado de los precios ha generado en la sociedad cierto pánico inflacionario que afecta tanto a las autoridades monetarias como a la sociedad mexicana.

Se ilusionó cuando la Secretaria del Bienestar informó que, en 2023, aumentarían 25% más el monto de la ayuda económica e intentó volver a trabajar cuando las Mantecadas Bimbo comenzaron a costar 30 pesos.

El gobierno morenista le quitó el Seguro Popular, así que ahora la mayor parte del dinero que recibe lo destina a su salud pagando médicos particulares y medicamentos.

A su edad ya no lo aceptan en trabajos fijos, es por eso por lo que busca ganar dinero ayudando en los mercados: desde atender puestos, hasta trasportar hielo. Hace ya tres años que sobrevive de esas ganancias, sin embargo, han comenzado a bajar las tarifas acordadas, de los 300 pesos que le pagaban en las cocinas económicas ahora solo recibe 250 y el señor de la tienda le ha dicho que ya no necesita quien le ayude.

Paquito también es llamado “el hombre de los mil oficios” porque, según sus conocidos, nunca ha rechazado un trabajo por más pequeño o pesado que sea. De hecho, ni siquiera han notado que sus huesos se desgastan con cada paso que da.

Según el Centro Internacional sobre el Envejecimiento, los adultos mayores gastan en promedio 3 mil 232 pesos al mes en comida y bebida. Para Paquito ir al supermercado significa comprar únicamente lo básico: su dosis de glucosamina y un paquete de 6 panes, para así gastar 7 pesos con 50 centavos en el desayuno. El azúcar nunca la compra ahí porque el kilo pocas veces cuesta menos de 20 pesos y la carne no es opción por su mala calidad y alto precio.

Todos los demás artículos los compra en el mercado donde trabaja; antes compraba plátanos y manzanas, ahora compra la mitad de una piña y 15 pesos de jabón suelto. El pollo se lo gana cuando carga cajas desde la pollería hasta el auto del dueño de esta, pero es consciente de que cada día aumenta su precio, pues a finales de marzo el kilo de pechuga costaba 100 pesos y ahora en la primera semana de abril, cuesta alrededor de los 120 pesos; eso sin olvidar que según la Profeco durante 2022 lo máximo que debía costar un kilo de pechuga de pollo a granel, con hueso, piel y sin rabadilla eran 110 pesos con 32 centavos.

Pertenece al grupo de las S, T, U y V, es decir, que es parte del penúltimo sector de población al que el gobierno le deposita su ayuda bimestral. 

Sus padres no pueden enviarle dinero desde el más allá y nunca echó raíces para formar una familia, así que tiene que valerse por sí mismo. 

Actualmente, es 2023, pero en febrero de 1988 el índice de inflación tuvo su punto más álgido: 179. 7%, Paquito tiene una similitud con los adultos mayores que vivieron en los 80 's: ambas generaciones han sido afectadas por la inflación.

Desde quitarle espinas a los nopales hasta ser “viene, viene” son los trabajos que Paquito realiza día a día, con pocos descansos y algunas carencias. Se siente agradecido por al menos tener alimentos en la panza y de que la gente a su alrededor le ofrezca un apoyo; pero está seguro de algo: no sabe cuánto tiempo resistirá.