Él hacía aparición en muchas de sus obras, en donde utilizaba la sátira para cuestionar las costumbres francesas de aquel entonces.
Jean-Baptiste era su verdadero nombre, pero al ser la profesión de teatro mal vista, adoptó el nombre por el que lo conocemos hoy.
Su amor por el teatro lo llevaría en muchas ocasiones a la cárcel, debido a las deudas acumuladas. Pero pronto encontraría la manera de difundir sus obras recorriendo el país y ganándose la fama y renombre por su peculiar forma de narración.
Su éxito fue tal que por decreto del rey pasó a ser el encargado de las diversiones de la corte.
Entre sus obras destacaron: Tartufo, El Misántropo,El avaro, El enfermo imaginario, Don Juan, La escuela de los maridos, entre otras. Durante sus carrera escribió alrededor de 25 obras, cuya vigencia permanece después de 398 años de su nacimiento.
“A quienes me preguntan la razón de mis viajes les contesto que sé bien de qué huyo pero ignoro lo que busco”.
0 Comentarios