Fotografía: Ale Carmona Estilismo: Dania Sanson Maquillaje: Jasive Carmona |
Tres ejes dividen a Francelia Bahena: el diseño, la investigación y la danza. Son totalmente distintos, pero todos involucran una misma pasión.
—¿Cuál es la meta de Francelia Bahena?
—No quiero que lo que digo se quede en libros que pocos leen o en artículos que nadie visita. Quiero que mi contenido se comparta, se debata, incluso que lo refuten. Quiero que la información que divulgo genere conversación.
A punto de cumplir 27 años, Francelia Bahena es una mujer oriunda de Coacalco, Estado de México, que estudió Diseño y Comunicación Visual en la Universidad Nacional Autónoma de México. Además, se graduó con especialidad en Edición Gráfica y Multimedia e Hipermedia, pero fue hasta 2016 cuando decidió enfocar todos sus estudios a una industria que a veces resulta tan glamurosa como temible: la moda. Enfocada en la moda sostenible, que según el gobierno mexicano busca fomentar una actitud más responsable y ética frente al consumo, Francelia se adentra en temas que pocos tocan actualmente.
Con alrededor de 5,000 seguidores en redes sociales, Fran se dedica a crear contenido que confirme la leyenda que ella misma ha divulgado: “La moda responsable es posible”. Fusiona la sustentabilidad con la moda a través de columnas, vídeos, charlas e incluso ha creado un repositorio online llamado “Moda responsable” en donde comparte todo lo que debes saber acerca de la industria de la moda desde una perspectiva social.
Todo comenzó con sus dos primeros acercamientos a la industria, el primero fue con la ropa pues a su mamá siempre le importó que ella vistiera bien y asegura que antes que cualquier otra cosa su madre le repetía: “Sí, pero vístete bien”.
Después, al comenzar sus estudios en la Facultad de Artes y Diseño, cambió totalmente su visión respecto a la moda ya que el ver la cantidad de outfits, de propuestas y de perspectivas distintas que maneja la sociedad, la hizo comprender que la moda no sólo es una tendencia, sino que una simple prenda trae consigo una cadena de distintos procesos. Fran narra: “En ese momento yo sólo podía interpretar a la moda desde una perspectiva social: planteaba hipótesis, buscaba respuestas, leía autores y después los contrastaba, pero para mí no tenía sentido que alguien llamara “bonita” a la moda porque sabía que era un término subjetivo ya que lo que para mí puede ser agradable para cientos de personas no.”
Al concluir sus estudios, su mayor ambición era desarrollarse desde la industria de la moda y el diseño editorial, le interesaba mucho la forma en la que se presentaban las revistas de moda, estas fueron un parteaguas en su vida personal y profesional para que surgiera la necesidad de entender cómo la gente se vestía de diferente forma de acuerdo al contexto social en el que vivían. Gracias a su entorno, decidió ser investigadora de moda.
“Hablar de moda sustentable requería un conocimiento que yo aún no tenía, sin embargo, me di cuenta de que lo que ya era conocido para mí podría ser de utilidad para otras personas.”
Fue ahí cuando a base de investigaciones que seguían la línea de una perspectiva social le dio una definición al concepto de moda responsable y abrió su propio blog. El objetivo de esto es que la sociedad comprenda que tiene un poder de decisión como consumidor, pero que no todo recae en nosotras y nosotros porque hay cosas que definitivamente no podemos cambiar desde la individualidad, es decir, sí, tú tienes una responsabilidad como consumidor, acéptala y utilízala para mejorar tus decisiones al consumir.
—¿Qué significa actualmente la moda para ti?
—Es complejo, pero para mí, la moda es una industria donde una perspectiva individual hace que colectivamente logremos pertenecer a algo. Es una definición general, pero la moda también lo es y entra forzosamente la palabra industria porque es un negocio poderoso desde la perspectiva visual y económica.
Como agente de cambio, su experiencia ha sido reflexiva, ya que fue de las primeras personas en crear contenido enfocado a estas dos vertientes que son la sustentabilidad y la moda, entonces cuando los influencers comenzaron a capitalizar su contenido tuvo que luchar entre aplacar su propio ego y seguir hablando de los temas que realmente le importaban o en convertir su contenido en un espacio vendible, claramente, la segunda opción no era lo que ella deseaba.
“Soy libra, por supuesto que me gusta dar conferencias, platicar todo el tiempo, amo crear contenido, pero en realidad quiero dar un mensaje. Antes que difundir información, yo la divulgo porque la divulgación busca que la mayor parte de tu audiencia pueda entender el mensaje técnico que tú ya has aterrizado a un lenguaje más común y entendible.”
Francelia no es sólo lo que ya ha hecho sino que también es sus futuras aspiraciones, es por eso que su principal meta es formarse como investigadora académicamente ya que esa es la validación que se necesita para ser reconocida, sin embargo, lo más importante para ella es que su audiencia entienda lo que está divulgando.
—¿Qué mensaje le darías a quienes luchan por tu misma causa?
—Que la moda responsable es posible. Uno tiene que decidir hacía donde plantea su camino y el que elijas no será el peor o el mejor, eso lo decidirá tu forma de desenvolverte en él. En ese sentido, intenta ser lo más ético y profesional posible para que logres destacar siempre respetando tus ideales.
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