Irán podría tardar hasta 10 años en derrotar el SARS-CoV-2

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Irán está pasando por una crisis en materia de salud debido a la COVID-19. A pesar de ya contar con vacunas alrededor del mundo para combatir la pandemia provocada por la enfermedad, Irán se rehúsa a comprar vacunas que provengan de occidente, hecho que recientemente ha generado que el presidente Hasán Rohani advierta sobre una “cuarta ola”, a la vez que dijo que podría tardar hasta 10 años para que Irán supere la enfermedad.

Después de que el líder supremo de Irán, Alí Jamenei, dijera el mes pasado que las vacunas provenientes de Estados Unidos y Reino Unido quedaban prohibidas debido a que dudaba de la efectividad de estas, el país ha tenido que atravesar por varios incrementos en la tasa de contagiados y muertos.

Irán es el país más afectado en la región de medio oriente y esto se ha visto en la declaración más reciente de su presidente Hasán Rohani. El día de hoy, Rohani advirtió al pueblo iraní que se preparan para una “cuarta ola”, al mismo tiempo informó que hay ciudades en la provincia de Kuzestán consideradas como zonas rojas.

Debido de este incremento el presidente comunicó lo siguiente: "Incluso con las vacunas, podrían pasar hasta diez años hasta que el virus finalmente sea derrotado. La gente no debería esperarse, por el momento, un retorno a la normalidad, al pasado".

Por esto mismo, el presidente ha exhortado a la población a seguir manteniendo las medidas precautorias para combatir la enfermedad, mismas que incluso podrían continuar los siguientes 9 o 10 años, al menos, en este país de medio oriente.

"Aún no está claro cómo de eficaz es esta vacuna, cuánto tiempo será segura, aún no está claro, pero hay que vacunarse. No queda más remedio. El mundo se está orientando hacia la vacunación, y nosotros también", declaró. La vacuna que ya utiliza el gobierno en su campaña de vacunación que inicio este martes, es la vacuna rusa Sputnik V, aunque también ha señalado que tiene intereses de comprar las vacunas producidas por China e India, esto recordando la prohibición de las vacunas occidentales.