El día de ayer 15 de junio se inició la cumbre G7, la cual es una reunión anual a la que asisten las principales economías del mundo: Canadá, que en esta ocasión es el país anfitrión; Estados Unidos, Francia, Alemania, Italia, Japón y Reino Unido. Su propósito es coordinar respuestas a los desafíos globales como lo son la estabilidad económica, la seguridad y el cambio climático.
Esta cumbre como cada año tiene invitados especiales y en esta ocasión fue la presidenta de México, Claudia Sheinbaum; Mohamed Bin Salmán, príncipe heredero saudí y líder ‘de facto’ de Arabia Saudí; Luiz Inácio Lula da Silva por Brasil; Anthony Albanese por Australia; entre otros.
La agenda de la presidenta Sheinbaum tenía como prioridad poder reunirse con el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, para tratar los temas de protección a los inmigrantes mexicanos, el aumento de remesas y los aranceles del T-MEC.
Sin embargo, el presidente Donald Trump decidió abandonar la cumbre de manera anticipada por los recientes ataques entre Israel e Irán, esto fue informado por la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, quien informó que el mandatario regresará este mismo lunes a Washington debido a la "gravedad de la situación en Oriente Medio", sin dar más detalles sobre los planes inmediatos de la administración estadunidense.
Antes del anuncio de la portavoz, el presidente publicó un mensaje urgente en su plataforma Truth Social:
“IRÁN NO PUEDE TENER UN ARMA NUCLEAR. ¡Lo he dicho una y otra vez! Todo el mundo debería evacuar inmediatamente Teherán.”
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