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| Imagen vía Instagram: @belindapop |
Tras más de una década sin lanzar un álbum de estudio, Belinda regresa con Indómita, un trabajo que no solo marca su retorno a la música, sino que también representa una evolución artística y emocional. Esta nueva producción retrata a una Belinda más decidida, capaz de tomar riesgos y de experimentar sin perder su esencia. Aquí no solo vuelve la cantante que marcó a toda una generación, sino una mujer que ha aprendido a transformar sus vivencias en arte.
Lanzado el día de ayer 5 de junio de 2025 bajo el sello Warner Music Group, Indómita se convierte en el quinto álbum de estudio de la intérprete y el primero desde Catarsis, publicado en 2013. Durante estos años, la artista no solo estuvo alejada de la industria musical, sino que también atravesó una etapa de crecimiento personal que se ve reflejada en cada una de las 17 canciones que conforman este nuevo material.
El disco ofrece una propuesta diversa, en la que Belinda transita del pop y el electropop al regional mexicano y los sonidos urbanos, mostrando una madurez artística que sorprende. Uno de los temas que más destaca es “Never Not Love You”, una inesperada colaboración con Thirty Seconds to Mars, donde combina el inglés con el español en una mezcla emotiva.
El álbum está cargado de colaboraciones que llaman la atención no solo por los nombres, sino por cómo se integran al universo sonoro de la artista. Natanael Cano suma su estilo en “300 noches”, Kenia OS acompaña a Belinda en “Jackpot”, Tito Double P aparece en “La Cuadrada” y Tokischa añade su energía única en “Wet Dreams”.
Esta variedad de voces y géneros es testimonio de la capacidad camaleónica de Belinda para integrarse con diferentes escenas musicales sin perder autenticidad. Las canciones no solo reflejan una nueva etapa, sino también a una artista consciente del momento que vive la industria, abierta a dialogar con los sonidos actuales.
En el apartado visual, Indómita también destaca por su estética cuidadosamente construida. Belinda apuesta por una imagen más oscura, casi cinematográfica, que acompaña con videoclips narrativos y llenos de simbolismo. Un ejemplo claro es el de “La Cuadrada”, donde junto a Tito Double P interpreta a una pareja de asesinos a sueldo. Esta narrativa visual refuerza la idea de que Belinda no busca simplemente lanzar música, sino ofrecer una experiencia artística completa que englobe sonido, imagen y emoción.
Indómita es, sin duda, un parteaguas en la carrera de Belinda. No solo por su regreso tras tantos años, sino por el riesgo que representa apostar por una identidad renovada y lograr construir algo más complejo y personal. Con letras introspectivas y un enfoque visual que destaca, la cantante demuestra que está lista para reconquistar al público y, al mismo tiempo, conectar con quienes apenas la están descubriendo.
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