Logano ejecutó a la perfección una estrategia de resistencia y se lleva la bandera a cuadros en Fort Worth.
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| Imágen: NASCAR. La NASCAR Cup Series vivió una carrera impredecible en el Texas Motor Speedway. En un óvalo que no perdona errores, Joey Logano consiguió una de sus victorias más trabajadas al remontar desde el vigésimo séptimo puesto para llevarse su triunfo número 37 en su carrera dentro de la máxima categoría del stock car. El auto número 22 del Team Penske manejó el desgaste, e interpretó las condiciones de una pista cambiante y relanzamientos que pusieron en prueba a los pilotos más experimentados. La definición del ganador se dio en la última vuelta tras un overtime. En la última relanzada, Logano se colocó al frente tras una lucha con Ross Chastain, quien largó desde el fondo (en la posición 31) y sorprendió con un ritmo consistente, agresivo y sin errores. El piloto de Trackhouse Racing, aunque Chastain no se pudo hacer con el triunfo, obtiene su mejor resultado del año.
El tercer escalón del podio parecía ser para McDowell, quien se encontraba la frente en el último tramo de la carrera; sin embargo, lo que pareció ser un pinchazo lo envió contra el muro y arruinó cualquier posibilidad de concretar un podio. Michael terminó fuera de la carrera sin posibilidades de regresar y con el sabor amargo de un podio que parecía ser suyo. Blayne se benefició de la situación y completó el podio, logrando consolidar un buen fin de semana tras la mala suerte que lo ha acompañado está temporada.
SUÁREZ: SEGUNDO FIN DE SEMANA DENTRO DEL TOP DIEZEl mexicano Daniel Suárez volvió a demostrar su valor dentro de una pista caótica. El regiomontano partió desde el puesto 25, y en medio de una carrera marcada por la suerte y las oportunidades, Suárez logró colocarse décimo tras el overtime, firmando un resultado valioso para el equipo, que consiguió meter a sus pilotos en la zona del frente. Este fin de semana la suerte acompañó al piloto mexicano, pues Daniel libró diversos accidentes, entre ellos el del auto número 45. Reddick perdió el control del stock car, llegando a impactar con el muro de contención, lo que lo dejó cruzado en el óvalo. El auto de Reddick quedó atravesado en la línea de carrera por la que manejaba Suárez. Sin embargo, el regiomontano reaccionó con reflejos quirúrgicos y logró esquivar lo que pudo haber sido un accidente devastador para el resultado del mexicano. Ese instante terminó por marcar un punto de inflexión para mantenerse en la lucha al frente.
ERRORES Y COLISIONESEn Texas la constante fue una: los errores individuales que terminaron con doce autos fuera de la carrera. Pilotos experimentados fueron puestos a prueba y no pudieron terminar debido a los daños provocados por sus propios errores, y en muchas ocasiones, estos errores involucraron a más de uno. Alex Bowman quedó atrapado en un incidente múltiple con Bubba Wallase. La secuencia del contacto dejó fuera de la carrera al piloto de Hendrick Motorsports. Otro pasajero de las circunstancias fue Preece, quien fue encajonado por Carson, el piloto de Spire Motorsport dejó sin espacio a Preece, llevándolo directo con el muro lo que terminó provocando una colisión con los autos que iban por la parte externa del óvalo. A su vez Cody se vio afectado por el accidente al no poder esquivar el accidente, y eso sentenció su resultado.
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PLAYOFFS Y GANADORES DEL TEXAS MOTOR SPEEDWAY
Austin Cindric se llevó el Stange uno tras una buena gestión inicial, aunque en el resto de la carrera su ritmo decayó y finalizó fuera del top veinte. Mientras que Kyle Larson, dominó el segundo Stange y lideró un gran número de vueltas aunque no logró mantener la posición tras los múltiples reinicios y, finalizó cuarto.
Logano quien capitaliza los errores de los pilotos, suma una nueva victoria que lo clasifica a los PlayOffs. Joey junto con Berry, Larson, Hamlin, Bell, Cindric, Byron, Wallase, y Elliot ya están clasificados para PlayOffs, dejando menos lugares para el resto de pilotos, que aspiran a llegar a la última fase de la temporada.
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