Hoy 27 de abril, la cadena estadounidense
de televisión CBS transmitirá el último episodio del exitoso programa conducido
por James Corden: The Late Late Show
Esta última semana se ha sentido álgida emocionalmente para quienes durante ocho años han seguido de cerca los sketches, entrevistas, e hilarantes momentos que han logrado consagrar al show televisivo como uno de los productos dorados de la cadena norteamericana.
Como parte del duelo en que James Corden vio acercarse la muerte de The Late Late Show –anunciada por sí mismo un año antes–, el general tono alegre e irreverente del programa se transformó en ojos vidriosos durante su último Carpool Karaoke, uno de los formatos que ayudó tanto al conductor como a su programa a viralizarse.
El pasado 24 de abril, como guiño al Carpool Karaoke más reproducido en Youtube (con 261 millones de vistas), parecía lógico que fuera Adele, la artista con más discos físicos vendidos en el siglo XXI y amiga cercana de James, quien tomara las riendas del vehículo en esta ocasión.
La conversación sostenida durante el encuentro entre amigos, además de anécdotas íntimas o cómicas, tocó también la nostalgia de Corden por dejar la ciudad que había dado vida a The Late Late Show, así como las dificultades para hacer funcionar el programa y contar con la participación de artistas invitados que aceptaran cantar junto a él en distintos vehículos y ciudades.
Aunque la idea de Carpool
Karaoke tiene sus orígenes con los podcasts “Carpool” de Robert Llewelyn en
2009, la primera presencia de Corden con un artista cantando sus propias
canciones se dio en 2011, cuando George Michael se subió junto a él de copiloto, motivado
por el especial caritativo de televisión británico: “Red Nose Day”.
Ahí fue verdaderamente sembrada la semilla que germinó hasta 2015, con la primera invitada oficial del entonces recién llamado Carpool Karaoke, Mariah Carey, quien se rehusó inicialmente a cantar sus propias canciones, pero sucumbió ante la ligereza de Corden y abrió camino para que artistas futuros fueran parte del formato, yendo desde One Direction en 2015 hasta Bad Bunny el pasado marzo.
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