"Don´t Look Up": El filme que ilustra la actual realidad social

A través de la historia del hombre hemos visualizado distintos eventos donde la violencia y la destrucción han sido sus principales bases para referir un cambio; una evolución humana. Es decir, las conquistas y guerras que ocurrieron durante la estadía del humano fueron las maquinas de cambio para evolucionar. Dentro de un gran error, deviene una gran lección. Sin embargo, contra la naturaleza de nuestro planeta no podemos combatir; y esto es precisamente lo que el reciente filme de Adam Mckay nos muestra.

"Don´t Look Up", una sátira de la realidad social.

"Don´t Look Up" (No Mires Arriba) es una sátira que presenta nuestro actual problema social: no ser capaces de admitir nuestros limites. La trama del filme nos narra el descubrimiento del Dr. Randall Mindy (Leonardo DiCaprio) y la estudiante Kate Dibiasky (Jennifer Lawrence), dos astrónomos quienes encontraron la trayectoria de un meteoro el cual está a punto de impactar contra la Tierra. Ahora, con la ayuda de su lenguaje intelectual, tratarán de advertir al Estado sobre este peligro; quienes están convencidos de que no es una situación seria. Y parte del filme, tampoco lo es por momentos.

Durante todo el largo trayecto del filme tanto la falta de seriedad como los absurdos acontecimientos en cada escena se vuelven constantes. Sin embargo no carecen de interés, formulan un escenario en el cual somos capaces de poder interpretarlos. En cada plano de la película existe una perfecta situación, un acto del cual percibimos, si bien, gracia, disgusto e incluso tristeza. Lo que más agrada de esta cinta es la sarcástica representación de la sociedad ante un tema inusual frente a los medios de comunicación. Si bien estas situaciones que retratan al "apocalipsis global" son recurrentes en cintas de Hollywood, dentro de la realidad son un mal externo del hombre; una causa fuera de la acción humana.

Pongamos de ejemplo a la actual pandemia. Cuando el COVID-19 comenzó aparecer en distintas regiones del mundo, en un principio se le culpo de ser un "arma biológica", una herramienta para exterminar distintos sectores de la sociedad: Ya sean por la dichosas antenas 3G, ya sea por la patética teoría de extraer el "liquido de la rodillas" cuando uno fallecía de esta enfermedad. Y es exactamente  lo que la trama presenta, satiriza a los personajes como las victimas de la historia, más no como los culpables de la situación. Aunque es obvio: ¿Cómo puedes culpar al humano de poder provocar la destrucción del planeta mediante un meteoro? Simple: Restarle importancia.

Lo que más proyecta la cinta es el interés humano. La presidenta Janie Orlean (Meryl Streep) le resta importancia al peligro porque sabe que no le conviene un escandalo social, sus interés están puestos a la ingenuidad de la población y solo actúa por propia cuenta cuando le representa un beneficio hacia su imagen y su Estado; y allí es donde tenemos la clásica escena del astronauta valiente a punto de ir al espacio para combatir contra el peligro. Es por eso que Don´t Look Up es diferente a otros filmes de ficción, porque combina situaciones de lo ficticio y lo real.

Para finalizar, hablemos del final de la cinta: la conclusión de la historia. Para no "spoilear" el filme solo me limitare a decir que es un final de lección, una conclusión impactante donde la sátira se convierte en drama puro, en tristeza. La conclusión de la trama llega a proyectarse de manera ruda porque, simplemente, el humano no esta hecho para su final. Tanto en las grandes elites gubernamentales como todos los sectores de una población deben aferrase a esta idea: nuestra existencia es imperfecta, solo somos un grano de arena dentro de una playa extensa. Y el humano jamás lo admitirá hasta ver su propio final.

Me gustaría concluir que este filme no es para toda la audiencia. Por supuesto, está abierta para cualquier público ; más sin embargo no para todas las expectativas. Es por eso que este filme recibe, en su mayoría, malas criticas. Porque es una falta de respeto a la inteligencia humana, porque en todo el rato del filme nos reprende con la idea de que el hombre es "idiota y codicioso por naturaleza". Sin embargo no debemos menospreciarla, ya que es de los pocos filmes que nos cuentan una verdad; una verdad del que nadie quiere admitir.