Países Bajos atraviesa un gran escándalo: se disuelve todo el gobierno

Foto: EFE/BART MAAT

El primer ministro de Países Bajos, Mark Rutte, ha decidido presentar su dimisión ante el rey Guillermo debido al escándalo administrativo que ha sufrido su gobierno y en el cual se involucran alrededor de 26,000 familias.

Después de una investigación parlamentaria a la que fue sometido el gobierno, Mark Rutte aceptó la responsabilidad del mal manejo de los subsidios para el cuidado de niños, lo que provocó daños irreparables en más de 26,000 familias y que culminó en una renuncia completa de todo el gobierno.

Como lo declaró el mismo Rutte en una rueda de prensa que sostuvo el día de hoy. "El Estado de derecho debe proteger a sus ciudadanos del todopoderoso gobierno, y aquí esto fracasó de forma estrepitosa". El “fracaso” que hace referencia es debido a que se acusó equivocadamente a las familias de fraude en ayudas sociales.

Estas acusaciones, las cuales no tenían fundamentos, llevaron a múltiples familias que recibieron el apoyo del gobierno a devolver dichos subsidios (algunos ascendían hasta los 100,000 euros), lo que generó una serie de repercusiones que fueron desde la quiebra de negocios hasta separación de parejas.

Al mismo tiempo, se le acusa al gobierno de xenofobia debido que las familias acusadas tenían ciertos perfiles étnicos, mayormente de origen turco y marroquí, catalogando este acto como una “injusticia sin precedentes” de 2013 hasta 2019.

La responsable de visibilizar este problema fue la abogada de origen español, Eva González Pérez, la cual comentó que respecto a lo ocurrido:

“Todas las familias tienen orígenes migratorios. Esto es un problema moral por muchas cuestiones. Si alguien del Estado te manda una carta diciendo que no tienes derecho a una cosa, te tienen que explicar por qué, y si tú puedes demostrar que sí tienes derecho, no te puede quitar esa ayuda. Pero ellos decidieron bloquear todas las subvenciones, dejando tiradas a las familias, incluso durante la apelación".

Aún con lo ocurrido, el primer ministro adelantó que seguiría en funciones para evitar un vacío en plena pandemia de covid-19. Ahora el rey Guillermo deberá analizar la dimisión y mantendrá al gobierno de forma interina a la espera de la celebración de los comicios de marzo.