Este jueves, la administración de Trump ha emitido normas que limitan los viajes de miembros del Partido Comunista Chino (PCC) y sus familiares.
La medida reduce el tiempo de validez de los visados no migratorios de negocios y los turísticos B1/B2 para los miembros del PCC y su familia directa de diez años a un mes.
Las normas tienen el objetivo de proteger a la nación de la “influencia maligna” del PCC, según el Departamento de Estado. La entidad también añadió que el partido trabaja para “influenciar a estadounidenses a través de propaganda, coerción económica y otras actividades nefastas”.
El Departamento de Estado también añadió que el partido, que tiene más de 90 millones de miembros, también “envía agentes a los Estados Unidos para descaradamente monitorear, amenazar e informar sobre ciudadanos chinos y grupos Chino-estadounidenses”.
El Ministerio de Asuntos Exteriores chino denunció esta acción:
“Esto es claramente una forma de opresión política en escalamiento hacia China por parte de algunas fuerzas anti-China en EUA que actúa con base en sesgos ideológicos y con una mentalidad arraigada de la Guerra Fría”, declaró la vocera del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Hua Chunyin.
Los nuevos lineamientos de la visa permitirán a los funcionarios estadounidenses el estatus del partido del aplicante a través de su formulario y de la entrevista.
(Con información de The New York Times)
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