La mayor goleada en un partido oficial a nivel de selecciones

¡Gol gana! 

Foto de El Universal

Hace exactamente 19 años, un 11 de abril del 2001 se dio uno de los sucesos mas impresionantes y bizarros en la historia del fútbol, se trata de uno de los marcadores mas abultados en la historia del fútbol profesional, reconocido por la FIFA y el libro Guinness World Records como la mayor goleada en un partido oficial a nivel de selecciones del que se tenga registro; que mas allá de las marcas y récords cosechados ante semejante hecho, las consecuencias fueron mucho mas allá del resultado del juego.

En un partido de ronda clasificatoria para el mundial de Corea-Japón 2002 perteneciente a la Confederación de Fútbol de Oceanía, celebrado en el International Sports Stadium en la ciudad de Coffs Harbour, Australia; se enfrentaron las selecciones de Australia y Samoa Americana, un juego que desde la previa pintaba para ser completamente desequilibrado, tanto en el trámite como en el marcador.

Los resultados que antecedían al partido por parte de ambas selecciones no eran nada alentadores para el conjunto samoano; Australia venia de golear sin piedad a la selección nacional de Tonga por 22 a 0, mientras que Samoa Americana venia de perder frente a Samoa por 8 a 0. Las cosas se complicaron para el equipo visitante con la prohibición para utilizar a 19 de sus futbolistas que formaban parte de la lista de convocados debido a que presentaron problemas con sus pasaportes. Otro problema al que se enfrentó la selección de Samoa Americana fue que no les permitieron convocar a jugadores menores de 20 años por asuntos académicos.

Todos estos factores dieron como resultado una goleada sin precedentes, un marcador final de 31-0 que no solo significaría el resultado mas escandaloso en un partido oficial a nivel de selecciones en toda la historia; este suceso también fue decisivo en las aspiraciones y el cambio de mentalidad en el fútbol australiano, quienes a raíz de este acontecimiento concluyeron en cambiar de confederación. 

A partir de ese 11 de abril del 2001, el fútbol australiano entendió que si querían mejorar su nivel futbolistico debían cambiar de confederación cuanto antes. Siempre fueron el mejor equipo de la Confederación de Oceanía, eran ampliamente dominadores y no tenía mayores problemas para avanzar a la siguiente ronda, sin embargo, el repechaje representaba el verdadero conflicto; una vez instalados en la repesca, resultaba toda una proesa salir victoriosos en ese enfrentamiento el cual era el ultimo boleto para la Copa del mundo. Tan complicado era que solo habían participado en un mundial en toda su historia. 

Se dieron cuenta que su mayor fortaleza también era su mayor debilidad, esa misma zona en la que eran los dominadores absolutos también era la que limitaba el crecimiento de nivel en su juego. Cambiar de confederación implicaba enfrentar a selecciones mucho mas fuertes lo que significaba un camino mas complicado para lograr cosas importantes, sin embargo, a largo plazo implicaba un muy probable aumento en su nivel futbolistico y que le iba permitir no solo mayores posibilidades de clasificar a un mundial sino también competir dignamente en el mismo.  

Fue así como 4 años después, mediante un mutuo acuerdo entre ambas confederaciones se decidió que La Federación de Fútbol Australiana pasaba a formar parte de la Confederación Asiática de Fútbol, a partir del 1 de enero del 2006 Australia jugaría eliminatorias y torneos continentales con selecciones asiáticas. Para sorpresa de muchos logró clasificar al mundial de Alemania 2006, desempeñando un digno papel al quedar eliminados en octavos de final apenas perdiendo 1-0 frente al eventual campeón del mundo, Italia.