-Imagen: Twitter Oscarina González Güipe-
Las celebraciones de fin de año y navidad son fechas en que se reúnen las familias, se reencuentran amigos y son perfectas excusas para fiestas y salidas. Pero, ¿saben cómo viven estos días las personas con discapacidad visual?
Hoy, 4 de enero, se conmemora por segunda ocasión el Día Mundial del Braille, con el objetivo de respetar y dar a conocer los derechos humanos para las personas con discapacidad visual, además de crear conciencia sobre la inclusión de personas ciegas o débiles visuales.
Fernando Ponti, joven de 27 años y originario de Cuernavaca, Morelos, celebró una típica posada navideña con chicos que también tienen discapacidad visual de la CASA PONTI. En la fiesta hubo: piñata, comida, convivencia con las familias y alberca para que se refrescaran todos.
"Todos tuvieron la venda y les dimos las vueltas, pero de forma convencional cuando parten la piñata te avientas por los dulces y una de las temáticas fue que cuando caían los dulces nadie se podía lanzar. Cuando yo decía 'van por los dulces' se podían acercar pero decían ¡VOY!, como en el futbol para ciegos. Y todos lo respetaron. Hubo comentarios muy buenos y estaban muy contentos."
Julián Landagaray Espíritu, quien tiene 59 años de edad y desde el 2013, a partir de una operación mal realizada, tiene ceguera total, comenta que realiza cada año algún guiso para ambas festividades, pero en esta ocasión hizo toda la cena. Toda la familia se reunió para compartir gustos sobre bandas de Rock.
A diferencia de Ricardo Alcántara, de 22 años y estudiante de la carrera de Derecho en la FES Aragón, y quien pasó la navidad con su familia materna con comida, piñata, pláticas y el clásico arrullo al niño Dios. Para año nuevo, se acercó por primera vez a la familia de su novia y tuvo que poner de su parte para que no fuera incómodo. Hubo alcohol, jugaron lotería, señas y gestos y cantaron.
"Me preguntaron '¿Y tú cómo le vas a hacer?', como pude le hicimos y resultó bien. Me invitaron al recalentado. Supongo que es una buena señal."
La familia de su novia no tenía conocimiento de cómo tratar a una persona con discapacidad visual. Sin embargo, lo integraron y la confianza al final permitió que: "Preguntaron que cómo me bañaba y cosas tan absurdas que dan risa, pero al menos así se hacía más fluida la plática." La gente está desinformada sobre la inclusión a menos que estén en contacto con una persona con discapacidad. También los chicos entrevistados no sabían del Día Mundial del Braille.
-Serie navideña y decoraciones de la época-
Guillermo González, funcionario público de la alcaldía Gustavo A. Madero e integrante de AZTECAS, equipo de futbol para ciegos de la Ciudad de México, considera indispensable el Braille aún con la fuerte presencia de la tecnología, ya que con la lectura ellos pueden aprender cómo se redacta correctamente una oración, párrafo o texto y la acentuación debida.
"Entre más difusión o más campañas hayan, va a ser mejor para la población. Desde pequeños deberían de recibir esta información para ir creciendo con el conocimiento. No sólo las personas ciegas necesitan tratamiento y atención, sino todas las personas con las diferentes discapacidades. Si me dieran la oportunidad de armar una campaña primero fomentaría la información desde los preescolares hacia arriba y luego la difusión en medios masivos para gente más adulta de cómo apoyar a la gente."
Leonardo Serafín Rodríguez, hombre de 34 años de edad, quien tiene miopía, astigmatismo, foto-sensibilidad, retinosis pigmentaria y reducción del campo visual, condiciones que lo llevaron a contar únicamente con 10% de vista; es beneficiario del gobierno en la alcaldía de Tláhuac y biólogo. Nos platica que su desgaste ocular es de una persona de 90 años. No quisieron que aprendiera Braille anteriormente porque era débil visual. Gracias a la reducción tan acelerada de su vista es inminente que la pierda completamente en 4 años y su propósito de año nuevo es aprender la lecto-escritura Braille.
"Si bien la tecnología ha avanzado muchísimo, la escritura es importante y no podemos dejar que se pierda. El alfabeto te da una identidad, una cultura y la escritura es la base de la comunicación. Aunque es claro que existe la desinformación y primordialmente en el trato que deben tener o cómo atender a cualquier persona con discapacidad."
Todas las personas con discapacidad visual han sufrido al menos una vez en su vida de discriminación y violencia física o verbal. Y a pesar de ello, creen que esto se da en su mayoría por la ignorancia o el miedo de no saber cómo apoyar.
Julián Landagaray ofrece conferencias para apoyar a la gente a sobrellevar algún tipo de depresión, y poder salir adelante con alguna discapacidad se trata más de un tema psicológico que una barrera física, mental y biológica.
"Hay gente que tiene todo y se suicida, se droga o emborracha en la calle. Yo, que tengo una discapacidad, trato de ser buena persona y enseñar cosas buenas. ¡Soy afortunado de haber adquirido la discapacidad! Ahora me voy a dedicar a hacer las cosas como debo: apoyar a gente con y sin discapacidad alguna."
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